Recordando a Ángel González,
Ángel González Muñiz nació en Oviedo el 6 de septiembre de 1925 y falleció en Madrid en el 2008. Fue un reconocido poeta, además de catedrático y ensayista que estuvo adscrito a la Generación del 50 y que supo con su poesía atravesar los límites del territorio español. Formó parte de la Real Academia Española, ocupando el sillón de la letra "P", Premio Príncipe de Asturias de las Letras en 1985 y académico y Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana en 1996.
La madrugada era su tiempo, y la amistad y la noche jugaban con él hasta las tantas. Y de madrugada murió en un hospital de Madrid el poeta Ángel González a los 82 años, hace ahora 10 años exactamente. De su obra se destacan los títulos: "Áspero mundo" 1955 , "Sin esperanza, con convencimiento"1961, "Grado elemental" en 1961, "Tratado de urbanismo" 1967, "Breves acotaciones para una biografía" 1971, "Prosemas o menos" 1983, "Deixis de un fantasma" 1992 y su último libro,"Otoño y otras luces" 2001.
“Poeta de verso metafísico en ocasiones, humorístico a menudo, chistoso a veces, inteligente y emocionante siempre". Le gustó por encima de todo la amistad, que supo atender con esa generosidad que imprimía siempre a los asuntos importantes. Murió de lo que solo un poeta como él puede morir: de lo mucho que tenía vivido, que tenía amado, de lo mucho que había sabido apurar los venenos y los placeres del tiempo. Insustituible.
Les traemos aquí algunos poemas con tintes de Ciencia:
GLOSAS A HERÁCLITO | |
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ERUDITOS EN CAMPUS | |
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"Por aquí pasa un río", adaptado a una seguirilla
Por aquí pasa un río. |
Para que yo me llame Ángel González
Para que yo me llame Ángel González,
para que mi ser pese sobre el suelo,
fue necesario un ancho espacio
y un largo tiempo:
hombres de todo el mar y toda tierra,
fértiles vientres de mujer, y cuerpos
y más cuerpos, fundiéndose incesantes
en otro cuerpo nuevo.
Solsticios y equinoccios alumbraron
con su cambiante luz, su vario cielo,
el viaje milenario de mi carne
trepando por los siglos y los huesos.
De su pasaje lento y doloroso
de su huida hasta el fin, sobreviviendo
naufragios, aferrándose
al último suspiro de los muertos,
yo no soy más que el resultado, el fruto,
lo que queda, podrido, entre los restos;
esto que veis aquí,
tan sólo esto:
un escombro tenaz, que se resiste
a su ruina, que lucha contra el viento,
que avanza por caminos que no llevan
a ningún sitio. El éxito
de todos los fracasos. La enloquecida
fuerza del desaliento...
Magnifico poema: ELEGIA PURA
Aquí no pasa nada,
salvo el tiempo:
irrepetible
música que resuena,
ya extinguida,
en un corazón hueco, abandonado,
que alguien toma un momento,
escucha
y tira.
Pedro Guerra canta sus poemas en el disco "La palabra en el aire":
Y Joaquín Sabina le canta:
Y le dejamos con una fotografía con su amigo José Manuel Caballero Bonald, con el que compartió muchas noches y muchas copas:
"Esa es una de las cosas que echo de menos: la barra del bar como centro de la vida", dice Bonald, nostálgico, añorando a su amigo. AMJ
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