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Tsunamis y Matemáticas.

     

Ya sabemos todos qué es un tsunami. Sobre todo después del acaecido en Indonesia en 2004 con más de 280.000 víctimas, entre muertos y desaparecidos, y un amplio territorio devastado o el producido en Japón, en Fukushima, igualmente con una alta cifra de muertes (más de 20.000) y un desastre económico y ecológico sin precedentes. El primero se produjo como resultado de un terremoto submarino, con epicentro entre 10 y 30 km. bajo el mar, de magnitud Mw 9,3 (es el segundo terremoto más grande desde la existencia del sismógrafo, después del de Valdivia (Chile) en 1960). El segundo se produjo igualmente en el mar (11/Marzo/2011), a una profundidad de 32 km., con una magnitud de Mw 9.0. Ambos originaron un tsunami, con olas de hasta 30 y 40.5 metros, respectivamente.

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La película española Lo imposible, dirigida por Juan A. Bayona, recrea la historia de una familia española durante el tsunami del año 2004. Con un éxito de taquilla y crítica a nivel mundial, sin precedentes en una cinta española, recoge, estremecedoramente, las experiencias familiares de esos días fatídicos del 26 de Diciembre. La película completa en Youtube:

Aquí en España también tuvimos nuestra ración de tsunamis. El ultimo, de los importantes, ocurrió hace más de dos siglos y medio. Concretamente el 1 de Noviembre de 1755. Se le conoce como el terremoto de Lisboa, producido en el mar a 300 km. de la capital portuguesa, con una intensidad de aprox. 9.0 en la escala de Richter. Produjo tres tsunamis con olas de entre 6 y 20 metros de altura, que causaron más de 100.000 muertes y devastaron Lisboa, entre otras ciudades de España y Portugal.

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En España se produjeron daños derivados de este terremoto: algunos de ellos graves en la catedral de Jaén, y en iglesias de Utrera (Sevilla). Incluso desperfectos importantes en la Torre del Oro de Sevilla, así como más de trescientas casas. Como anécdota apuntaremos que las campanas de la Giralda tocaron solas, con el movimiento de la Tierra. La catedral de Astorga (León) sufrió graves desperfectos, así como en iglesias y sus torres de toda España. Pero lo que produjo más daños fue el tsunami originado por el terremoto. Los daños fueron cuantiosos y unas 2.000 personas murieron.

En Ayamonte (Huelva, en la frontera con Portugal) fueron 1.000 las personas que perdieron la vida y 400 en Lepe (Huelva). Igualmente en la provincia de Cádiz –El Puerto, Sanlúcar, Jerez- se produjeron numerosas víctimas. En la capital –Cádiz- las olas alcanzaron 12 metros de altura, durante las tres embestidas del mar. En las costas de la provincia de Cádiz también sufrieron sus acometidas. Ver en druta.com.

Dada la concentración urbanística en las costas de las provincias de Cádiz y Huelva, que ha conllevado un aumento demográfico espectacular, un terremoto como éste, en la actualidad, tendría consecuencias devastadoras, imposibles de evaluar, pero para ello están los modelos matemáticos. Y ahí está nuestra ciencia para establecer modelos y prever que ocurriría.

En la capital de Cádiz esos modelos matemáticos predicen que quedarían inundadas todas las zonas fuera de Puertas de Tierra –hoy la mayor parte de la población-, y en general, todas aquellas zonas que estén a menos de 15 metros de altura sobre el nivel del mar. El proyecto TRANSFER (acrónimo de Tsunami Risk and Strategies for the European Region) pretende crear unos sistemas de alertas, inducir planificaciones urbanísticas para evitar inundaciones excesivas y sobre todo, intentar evitar zonas vulnerables a estos fenómenos o mitigar sus consecuencias. Sin embargo, todavía no hay medidas concretas ni redes de alertas efectivas ni planes de evacuación ante la masificación turística: ¿Será la crisis, la desidia o la incompetencia de las autoridades las que mantienen esta situación de inseguridad manifiesta?

Tsunamis en el Mediterráneo

Sabemos que los tsunamis de la costa atlántica son más potentes que los que pueden producirse en las costas mediterráneas, pero no dejan de ser destructivos y suponen un riesgo para la población. En 2003 hubo un pequeño tsunami en Mallorca producido por un terremoto en Argelia, que produjo daños importantes en embarcaciones de las islas.

Los tsunamis producidos en el Mediterráneo son las que se han estudiado más profundamente y estos días se ha presentado al público el libro con sus conclusiones. El Instituto Oceanográfico de España, en colaboración con el Departamento de Análisis Matemático de la Universidad de Málaga, ha creado modelos matemáticos para estudiar –predecir- las consecuencias de un tsunami en las costas andaluzas que baña el Mediterráneo.

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El profesor de Análisis Matemático Jorge Macías, su grupo Edanya (Estudio de Ecuaciones Diferenciales, Análisis Numérico y Aplicaciones ) y otros oceanógrafos malagueños han analizado –en un estudio de cuatro años de duración- los riesgos de un tsunami en el mar de Alborán, teniendo en cuenta multitud de variables de la cuenca. Han utilizado 330 millones de ecuaciones para determinar los movimientos del maremoto. Tardaría 38 minutos en llegar a la costa de Málaga –primero la Oriental y después la Occidental-, siendo la capital la última en llegar. La zona Occidental –Marbella, Benalmádena, Fuengirola y Torremolinos- sería la que estaría en una situación más delicada. A los 22 minutos llegaría a las costas granadinas y almerienses y entraría mar adentro entre 200 y 400 metros. La ola sería de unos 80 cm. de altura, pero su peligrosidad no sería por la altura sino por la inmensa cantidad de agua que arrastraría.

Aunque hay mucha actividad sísmica en esa zona de Alborán, suele ser de baja intensidad, por lo que convierte a la costa andaluza una zona de bajo riesgo de tsunamis. Pero si hay un terremoto por deslizamiento el tsunami lleva consigo un volumen de agua mayor que en otros casos, aunque de menor altura, pero en el caso de uno parecido al registrado hace unos 20.000 años –con deslizamiento incluido- las olas podrían ser de hasta 14 metros de altura. Todo ello es mitigado por el relieve submarino que haría que los daños no fuesen tan calamitosos ¡Algo catastrófico, pero improbable!

                 

Esta colaboración entre instituciones científicas ha dado lugar al libro “Deslizamientos submarinos y tsunamis en el mar de Alborán. Un ejemplo de modelización numérica”, que es l que se ha presentado hace pocos días. Ver noticias en Diariosur o en La Opinión de Malaga.

La colaboración entre investigadores de distintas ramas de la Ciencia da frutos, a veces, que sirven para entender el medio que nos rodea, prever las consecuencias que ocasionan algunos fenómenos y mitigar, en lo posible, sus efectos. La Ciencia esta siempre al frente de la investigación y del progreso de la sociedad. ¡Que no la corten ni la recorten! AMJ

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