La vida es nuestra pasión, de José Bergamín.
Del escritor español José Bergamín (Madrid, 1895; San Sebastián 1983) traemos hoy un corto, pero intenso, poema del libro Duendecitos y coplas (1962).
La vida es nuestra pasión.
La verdad, nuestra razón.
(Cuando de verdad queremos —lo que de vida soñamos—
La verdad, la padecemos, —la vida, la razonamos.)
La vida es nuestra razón.
La verdad, nuestra pasión.
Bergamín, escritor, poeta, dramaturgo, ensayista,… sus primeros escritos tratan de aforismos y filosofía. Republicano convencido, católico y comunista (“Con los comunistas hasta la muerte…pero nada más”) tuvo que exiliarse después de la Guerra Civil donde su bando republicano, en el que militó activamente, perdiese la contienda. Hasta 1970 no vuelve a España, aunque hubo un periodo desde 1958 a 1963 en el que vivió en Madrid, pero hubo de exiliarse nuevamente tras sus enfrentamientos con el régimen del General Franco. Durante sus últimos años en España se radicalizó bastante y fue un objetor de la Transición Española como método de paso de la dictadura a la democracia. Apasionado de los toros y del cante y baile flamenco, como poeta ha quedado, en la Literatura española, a la altura de Machado o Juan Ramón Jiménez. Ver blog1 y blog2, dedicados a su obra, a información sobre su vida o artículos y ensayos sobre su obra.
Como aficionado a los toros y al flamenco escribió mucho sobre estos temas, y los artistas le devolvieron "ese favor”. Muchos cantaores le rindieron homenaje cantándole sus poemas: José Meneses, Vicente Soto "El Sordera", Carmen Linares, Miguel Poveda, Marina Heredia o Carmen Cortés -al baile-. También Enrique Morente le canta. En los vídeos que siguen, primero por tangos:
La plaza por ser la Plaza
Tiene una mitad de oro
Y la otra mitad de plata.
Y la otra mitad de plata,
Se enciende el sol por un lado
Y por el otro se apaga;
Por un lado es abanico
Por otro media naranja.
Los dos juntos redondean
El círculo de la plaza
En un suelo y en un cielo
Que son desiertos del alma
.../...
Escuchen también la versión de este poema y por tangos, igualmente, por el cantaor Manuel Lombo.
O las bulerías del toro:
AMJ
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