La increíble historia del nacimiento del metro.
Leía hace días en el blog francés Images des Mathématiques una entrada sobre el problema de la medida, pero no el conocido problema tratado en Matemáticas Superiores, sino la Historia de cómo se creó el metro: sí el metro, la unidad de longitud(Puede verse en http://images.math.cnrs.fr/Un-homme-a-la-mesure-du-metre-I.html ). Después de repasar las vicisitudes sufridas por los encargados de la definición de la nueva medida, me he decidido hacer también una entrada sobre la cuestión(Toda la historia aparece contada en el vídeo en dibujos animados anteriormente, de forma extraordinaria, aunque en francés).
El uso de pesos y medidas era tan heterogéneo en la Europa del siglo XVIII y anterior, que no solo en distintos países se utilizaban distintas unidades para medir, sino que incluso en distintas ciudades del mismo país ocurrían circunstancias parecidas. Pero lo peor no era esto sino que incluso llamándole de la misma forma a la unidad de medida, en cada ciudad podía diferenciarse y significar otra distinta: no coincidían la misma unidad de medida en distintos lugares. Como podemos suponer esto era el caos y los problemas económicos surgían porque, en general, no se sabía qué cantidad se estaba comprando, si era cara o barata, y todo ello creaba una inseguridad palpable y dificultaba las transacciones económicas, incluso entre ciudades o países muy próximos.
La Revolución Francesa tenía como uno de sus objetivos la universalidad; por ello la Asamblea Nacional Francesa, en 1790, se hizo eco de este problema de la medida y se planteó intervenir en la cuestión, tratando de buscar medidas seguras, fiables y universales. Debía hacerlo de forma seria, basada en la naturaleza, anulando y evitando localismos y lo suficientemente rigurosa como para que pudiera ser admitida por otros Estados del mundo (¡Todo lo contrario que los nacionalismos imperantes en la actualidad!). En principio se propusieron varias alternativas (longitud del péndulo, arco en el ecuador y arco de meridiano) y la Academia de las Ciencias (¡con el prestigio que tenía, y la comisión encargada de este tema estaba formada entre otros por Lagrange, Laplace, Monge,etc!) decidió que se trabajara sobre la medida de un arco de meridiano. Más adelante se llevaron a cabo otras definiciones de metro, llegando así hasta la última XVII Conferencia General de pesas y medidas, que es la vigente en nuestros días y en la que se define un metro como la distancia recorrida en el vacío por la luz en un tiempo igual a 1/299792458 segundos.
Nuestros “amigos” Méchain y Delambre tuvieron que enfrentarse a multitud de problemas, en primer lugar los de carácter no científico: problemas con la Revolución Francesa, la Guerra franco-española y las intrigas y envidias de otros científicos que se oponían a su plan. En segundo lugar los problemas surgidos de la complejidad del trabajo a realizar. El método elegido para medir la porción de meridiano que pasa por París entre Dunkerque y Barcelona es el de la triangulación, que ya se utilizaba desde el Renacimiento.
En lugar de medir miles de kilómetros, midieron los ángulos de una sucesión de triángulos adyacentes(que pueden verse en las anteriores imágenes), y por operaciones geométricas elementales calcularon los lados de los triángulos y determinar así la longitud del meridiano. Así utilizaron triángulos de longitudes 30kms, y tomaron 90 de estos triángulos para medir el meridiano. Todas las peripecias sucedidas en estas mediciones quedan recogidas en el libro anteriormente citado de Ken Alder (¡extraordinario!). Además de todos los problemas lógicos que comportaba tal empresa, la dificultad de medir el meridiano era notable: exactitud de las medidas llevadas a cabo en el suelo, la corrección de los errores cometidos en triángulos geodésicos, la refracción del aire en la medición, etc. Las actas de todas estas dificultades y corrección de errores se presentó en 1798 y pueden verse aquí: http://www.e-rara.ch/doi/10.3931/e-rara-1836 . Pero ¿cuál era la longitud del meridiano?. Ellos sabían que en cada medición estaban cometiendo un error, pero que al ser múltiples mediciones pensaban que el error podía ser grave, aunque con probabilidad baja, y ello daba una gran confianza a la medición llevada a cabo.
Según parece Méchain cometió un error en la medición al principio, en el tramo de Barcelona, y una vez descubierto lo ocultó. Delambre terminó primero su labor e incluso le ayudó y creó en platino el patrón del metro. Revisadas por Delambre las notas dejadas por Méchain descubrió el error, pero tampoco lo desveló. Por ello parece que el resultado acarrea un error perpetuado en el tiempo y en las siguientes definiciones de longitud (incluso la definición actual basada en la velocidad de la luz). Así de acuerdo con las mediciones efectuadas hoy día con satélites, la longitud del meridiano desde el Polo hasta el Ecuador es de 10.002.290 metros. Por lo tanto el metro calculado por Delambre y Méchain es unos 0,2 milímetros más corto. Por ello se dice que triunfaron incluso en el fracaso: conocieron y modificaron nuestro conocimiento de la forma de la Tierra y el concepto de error. Además unificaron una medida para la posteridad, que era su objetivo.
Por lo tanto se creó el metro como la diezmillonésima de la cuarta parte del meridiano terrestre(aunque en Francia el metro como unidad de longitud no se instituyó hasta 1940).Incluso ahora la NASA nos dice que ello va cambiando y variando en función del deshielo del polo(¡veremos qué ocurre con el calentamiento global!).
Una ley de 19 de frimario del año 8 de la República Francesa(10 de Diciembre de 1799) firmada por Napoleón Bonaparte establecía el metro definitivo con el lema “ Para todos los pueblos y para todos los hombres”.
En España se implantó el 15 de Abril de 1848. Siguieron Chile(1848), Argentina(1863), México(1857), pero los anglosajones(EEUU, Inglaterra) no llegaron a implantarlo, ¡siempre con el pie cambiado!
Delambre sí pudo disfrutar de todo ello, del éxito y de la fama y del reconocimiento como científico y astrónomo de máxima reputación. Presidió el Bureau des Longitudes en 1800 y en 1801 era ya secretario de la Academia de Ciencias Francesa. Entre otras condecoraciones Napoleón le concedió un premio por la mejor publicación científica de la década y recibió más tarde innumerables condecoraciones, entre las que cabe mencionar la Legión de Honor y el Chevalier de Saint-Michel.
Junto con la Declaración de los Derechos del hombre y del ciudadano (1795), La Enciclopedia , el metro y el sistema métrico, son , sin duda, las cosas más importantes legadas por la Revolución Francesa a la Humanidad.AMJ
En este enlace de RTVE puede verse un vídeo, muy interesante, del nacimiento del metro(en español), en el programa Docufilia emitido el 7 de Junio de 2012. AMJ
3 comentarios
Andrés Badía Segarra -
Creo que el año 1978 no puede ser correcto, en todo caso sería 1798. Entre paréntesis les copio lo que creo es erróneo.
(Junio de 1792 y Noviembre de 1978)
Saludos y gracias por tan valiosa información.
joaquin -
eduardo peña -